Me lo dijeron mil veces más yo nunca quise poner atención cuando vinieron los llantos ya estabas muy dentro de mi corazón. Te esperaba hasta muy tarde, ningun reproche te hacía, lo más que te preguntaba era que si me querias. Y bajo tus besos en la madrugada sin que tu notaras la cruz de mi angustia solia cantar, te quiero más que a mi ojos, te quiero más que a mi vida, mas que al aire que respiro y más que a la madre mía. Que se me paren los pulsos si te dejo de querer, que las campanas me doblen si te falto alguna vez. ERES MI VIDA Y MI MUERTE, te lo juro compañero. NO DEBÍA DE QUERERTE, NO DEBÍA DE QUERERTE. Y SIN EMBARGO TE QUIERO.