Vulgarmente lo llamamos “bajón”, aunque muchas veces ese sentimiento no tiene nombre.Es una mezcla de vacío, amor, desamor, ausencia, necesidad, recuerdos. Es simplemente algo devastador a lo que es muy difícil ponerle un título. No encontramos solución. No vemos salida.Lo único que podemos hacer es encerrarnos o alejarnos para que nadie nos vea y dejar que ese dolor en el pecho se transforme en lágrimas para que pueda salir de alguna forma. Lo peor es que las lágrimas salen, pero el dolor no.