Tú, que no quieres estar conmigo pero tampoco sin mí.
Yo, que quiero mientras pretendo hacer ver que estoy alejándome.
Tú, por tu tonta costumbre de dejarlo todo a medias.
Yo, por miedo a decir adiós.
Tú, por miedo a quedarte.
Yo, por no atreverme a decir quédate.
Tú, por tu bipolaridad.
Yo, por mi ingenuidad.
Tú, por pedirme cosas imposibles.
Yo, por no poder negártelas.